Daniel Lacalle: “los gobiernos y los bancos centrales están perdiendo la capacidad de influir sobre la economía”

El pasado 11 de abril se celebró el X aniversario del Master in International Finance, un evento que reunió a antiguos alumnos de varias promociones, y que contó con un invitado de excepción: Daniel Lacalle, profesor del programa y uno de los economistas más prestigiosos de España.

Nuestro Director General, D. Álvaro Martínez-Echevarría, inició el acto alabando la valentía de quienes decidieron apostar por este master, cuyo apoyo fue fundamental para garantizar su éxito. “Sois una generación de valientes, porque fuisteis los primeros en apostar por este programa pionero en España (…) sois fundadores de este programa y de su éxito sucesivo. Podéis sentiros plenamente orgullosos”.

¿Desaceleración económica o expectativas más realistas?

Durante el acto, el profesor Lacalle impartió una conferencia sobre la ralentización económica, los retos que genera a nivel global y las posibles oportunidades que representa a nivel local. El economista matizó que el principal problema “no es que estemos viviendo una ralentización económica”, sino que “se ha generado un nivel de complacencia respecto a la capacidad de crecimiento de la economía”.

“Si un Gobierno introduce políticas de demanda, se genera una enorme expectativa de crecimiento. Pero las políticas de demanda siempre generan una decepción, porque los gobiernos no tienen más información que el sector privado sobre las necesidades de consumo, inversión o infraestructuras”

“Lo que está pasando ahora mismo es que estamos recuperando la sobriedad, recuperando la realidad de una situación económica que en los últimos 20 años se ha caracterizado por: bajo crecimiento, baja inflación y bajos tipos de interés”, explicó.

Lacalle destacó que estas elevadas expectativas son resultado de las políticas de demanda, es decir, las acciones que realizan los gobiernos para intentar influir en el ciclo económico. “Si un Gobierno introduce políticas de demanda, se genera una enorme expectativa de crecimiento (…) pero, como no puede ser de otra manera, las políticas de demanda siempre generan una decepción”, explicó. Según el economista, este problema es inevitable, ya que “los gobiernos no tienen ni más, ni mejor, ni mayor información que el sector privado sobre las necesidades de consumo inversión o infraestructuras”.

Liquidez y endeudamiento

El profesor Lacalle señaló que “siempre que el Gobierno lleva a cabo políticas de demanda, lo que está intentando hacer es disfrazar el ciclo económico”, algo que tiene dos grandes consecuencias. En primer lugar, cuando los bancos centrales rebajan los tipos de interés para impulsar la economía, aumentan la liquidez del sistema financiero, lo que fomenta el endeudamiento.

“Siempre que el Gobierno lleva a cabo políticas de demanda, lo que intenta hacer es disfrazar el ciclo económico”

Por otra parte, el crecimiento generado por ese endeudamiento es cada vez menor, porque el tipo de empresa que depende de unos tipos bajos y una elevada liquidez para crecer “son los negocios de bajísima productividad. Y si perpetúas un negocio de bajísima productividad y además lo refinancias constantemente vía liquidez, lo que ocurre es que el crecimiento potencial se reduce y, por supuesto, la deuda aumenta”.

Según el economista, financiar negocios de baja productividad tiene otro efecto imprevisto: no se destruyen las empresas improductivas, lo que a su vez es un freno para que aumente la productividad y crezcan los salarios.

Exceso de políticas de demanda

Según el profesor, las políticas de demanda generan una falta de confianza por parte de los agentes económicos, ya que envían un mensaje contradictorio. Un claro ejemplo es la política monetaria de la Reserva Federal, que reconoce que el crecimiento de la economía estadounidense es robusto, el mercado laboral atraviesa un momento excelente y las expectativas de inflación son moderadas, pero cercanas al 2,5%. Sin embargo, la Fed no está ajustando sus políticas para un entorno de crecimiento, pleno empleo  e inflación, sino que ha decidido bajar los tipos de interés y, probablemente, aumentar la tasa monetaria.

“Algo no concuerda. Si te digo que te prometo que te voy a devolver el dinero cuando me vaya muy bien y luego te digo que me va muy bien, pero no te voy a devolver el dinero, algo falla. O no me va tan bien o no te voy a devolver el dinero. En cualquiera de los dos casos, mi decisión será no prestártelo. Y por eso, la reacción inmediata de los agentes económicos no ha sido aumentar la inversión, ni gastar más”, explicó el profesor.

“Los gobiernos y los bancos centrales están perdiendo la capacidad de influir en la economía”

“Lo que nos estamos encontrando es un absoluto exceso de políticas de demanda. La obsesión por parte de gobiernos y planificadores centrales de lograr que las economías crezcan lo que ellos piensan que deben crecer”.

Menor crecimiento, pero mayores beneficios económicos

“El PIB es el único indicador económico en el que sumas lo que gastas con lo que ganas. Es fácilmente engordable (…) pero la formación del PIB está escapando de los métodos tradicionales”, explicó el profesor. Según Lacalle, este índice no reconoce la enorme cantidad de valor añadido que se genera a través de la tecnología.

El economista puso como ejemplo cómo la tecnología está transformado los procesos de decisión de compra. Así, a la hora de planificar un viaje para un fin de semana, es posible calcular en cuestión de minutos “la cantidad de ocio que vais a obtener por un precio determinado”. Esto es posible gracias a que se ha acelerado el proceso de formación de precios, que antes estaba lleno de ineficiencias e intermediarios, y que “se va a acelerar aún más gracias al blockchain”.

Daniel Lacalle concluyó su ponencia argumentando que la economía global está entrando en un entorno en el que el crecimiento del PIB será más pobre y las expectativas de inflación más bajas, pero en el que los beneficios económicos que recibe el ciudadano gracias a la tecnología serán mayores. “Los gobiernos y los bancos centrales están perdiendo la capacidad de influir sobre la economía (…) Lo que estamos viendo es la lucha entre los planificadores centrales por mantener la economía lo más cerca posible a 1980; y la realidad que se les escapa”.

Manuel Goudie Pujals, director del Master in International Finance y ex country risk manager de Citibank en España y Portugal, clausuró la jornada destacando la creciente comunidad de antiguos alumnos y agradeciendo su apoyo a todos los que cursaron el programa.