La educación ante los desafíos futuros

Por Javier Amo Fernández de Ávila, CEO de Iberiacards y director del Máster en Bolsa y Mercados Financieros del IEB.

El mundo cambia a una enorme velocidad, incompatible con situaciones estáticas y consecuentemente deberíamos ser capaces de crear un marco de desarrollo que permita a las generaciones futuras interactuar con estas nuevas realidades, por tanto, el cambio en los paradigmas educativos es una necesidad imperiosa.

En su concepción original, estos sistemas educativos estaban basados en los métodos del siglo XX, quedado desfasada, y su evolución, en el caso de que demos por sentado que haya existido, ha sido insuficiente y a una velocidad mucho más lenta que la de la sociedad a la que teóricamente debe adaptarse y servir.

Además, el tono facilista ha rebajado el nivel de exigencia hasta el nivel de desdeñar las calificaciones, llegando a permitir el progreso académico sin haber pasado ninguna de las pruebas de nivel necesarias. Por eso la escuela ha dejado de ser un ascensor social para convertirse en una especie de aparcamiento temporal.

En este sentido han concurrido dos factores fundamentales que no han coadyuvado a la evolución del sistema:

  • Por un lado, voy a referirme a los continuos cambios políticos en los sistemas educativos que recurrentemente se vienen produciendo.
  • Pero en mi opinión hay otro fundamental, que sería tratar de estrechar el gran abismo que existe entre lo que la nueva sociedad y las empresas necesitan, que a su vez cambia de forma constante, y lo que las universidades enseñan, lo cual estamos muy lejos de conseguir.

La universidad en su concepción histórica que aún permanece se ha configurado como un lugar de encuentro, en su mayoría físico, donde la actual generación, traslada a la siguiente su conocimiento y saber, a través de un sistema estructurado en títulos universitarios y en el que los profesores, (generalmente portadores de un conocimiento estático y fundamentalmente teórico), actúan como el motor…

Artículo completo publicado en la revista Global Square.