“Imponer sanciones a Bielorrusia es mucho más fácil que imponerlas a Rusia”

La reunión a puerta cerrada entre Kim Jong-un y Vladímir Putin ha despertado las alarmas de la comunidad internacional. Algunos analistas temen que un posible acuerdo de armas recrudezca la guerra de Ucrania, que ya se ha convertido en uno de los conflictos más sangrientos de las últimas décadas. Existe también la preocupación de que Corea del Norte abandone su ostracismo, para emprender una política exterior más agresiva. En este sentido, el gobierno de Japón ha denunciado que un posible acuerdo armamentístico violaría las sanciones de las Naciones Unidas.

“La reunión entre Putin y Kim Jong-un ha creado una fotografía de Guerra Fría del siglo XXI, donde uno va con su tren blindado para reunirse al este de la Federación Rusa”, señala José María Viñals, director del Máster en Relaciones Internacionales del IEB. Por lo tanto, aunque el contenido del acuerdo se desconozca aún, podemos presuponer que el dictador podría haber pedido una serie de recursos como tecnología satelital, entre otras cosas, a cambio de un suministro considerable de armamento y munición artillera necesaria en el frente ucraniano”.

Entrevista al profesor Viñals en Negocios TV: