Enertech y las renovables

Enertech

Por Rodrigo Villamizar, profesor del programa Finanzas para la Sostenibilidad y el Cambio Climático.

El debate sobre la revolución digital está tomando a ENERTECH (el sector de la tecnología de punta en energía) como si se tratase de una tormenta: Alemania y sus empresas medianas están liderando el camino.

Periódicos del Reino Unido han empezado a publicar los primeros artículos escritos conjuntamente por robots y humanos. El proyecto ‘piloto’, que comenzó a finales del noviembre pasado, ha logrado hasta el momento publicar 20 historias que contrastan el declinar de los combustibles fósiles (especialmente el carbón, pero también la incertidumbre que amenaza al petróleo ante la aparición disruptiva del coche eléctrico y las baterías). “Esta nueva modalidad nos proporciona contenido que normalmente no seríamos capaces de producir”, según The Financial Times.

La inversión digital energética ya ofrece enormes beneficios. Como ha señalado una reciente investigación de la Universidad de Cambridge, el proceso algorítmico de Big Data en las energías renovables está demostrando ser mucho más inteligente que las decisiones de inversión humana sin ayuda de lo que aporta a los inversores (generalmente empresas utilities, Independent Power Producers o IPPs, Fondos de inversión en infraestructura energética y aún bancos) la combinación ‘gloriosa’ del Internet de las Cosas (IoT) con Big Data. Gracias a ello, podemos analizar volúmenes gigantescos de datos para explotar si el precio, las condiciones meteorológicas, el riesgo y el retorno de la inversión están en línea con la proyección original y el nivel de riesgo asumido por el inversor.

En los buenos tiempos, eso sucedía sin la ayuda de los algoritmos de optimización que han desarrollado empresas alemanas como Kaiserwetter bajo la conducción y alianza de SAP; uno de los líderes mundiales en software para soluciones de empresas y mercados. Esto, sin duda, ha hecho que los mercados de electricidad sean más líquidos y eficientes. Pero, como en todo proceso disruptivo, como las energías renovables a costos inferiores que las tradicionales o los coches de auto-conducción, hay una situación contradictoria: la tecnología se mueve más rápido que los políticos (o que los votantes), superando los marcos legales y reglamentarios.

Así, como todavía nadie sabe cómo asignar responsabilidad, si un programa financiero de auto-aprendizaje se vuelve loco (lo cual parece estar sucediendo con Bitcoin), el desarrollo tecnológico en la producción de energía de bajo coste parece estar lejos de la mirada pública. En realidad, hay una gran cantidad de innovaciones digitales emergentes que aún no han atraído la atención pública, pero que tienen implicaciones importantes para disminuir el riesgo que asume todo inversor y para dar un mayor alcance a su capacidad de optimizar el “performance” de cada proyecto; independiente de donde se realice.

Hace algunas décadas, la mayoría de los inversores asumieron que los mercados eran un lugar donde intercambiaban información, comercializaban productos y servicios y, con base en ello, definían estrategias ideadas en sus cerebros (o comités de inversión) para tomar las decisiones. Pero esto ha cambiado. Tanto en el mundo de la inversión en las energías tradicionales como en el segmento más dinámico: las energías renovables.

JPMorgan Analyst, estima que apenas el 10% del comercio de los mercados de valores de los Estados Unidos es actualmente conducido por comerciantes humanos discrecionales y que, en términos de inversiones en energía, actualmente, las computadoras están generando alrededor de solo el 3%. Ello, comparado con el 90% del comercio en los mercados de valores, el 60% de los futuros y más del 50% de los bonos del tesoro, da una idea de lo que se ve venir en el área de infraestructura que dominará la inversión en los próximos años.

Cada vez más, el aprendizaje e interacción de y entre las máquinas y la capacidad de realizar análisis inteligente haciendo uso del torrente de datos que emanan de los activos de generación eléctrica se están usando para analizar datos, intercambiar valores y ofrecer asesoramiento sobre inversiones. Las finanzas y los datos técnicos digitales se extienden por fronteras geográficas y clases de activos, haciendo de la generación de energía digital una nueva clase de activo de inversión. Eso crea un alto estímulo para aumentar la exposición disminuyendo el riesgo y que, además, los antiguos problemas de incertidumbre disminuyan vertiginosamente.

Los reguladores admiten que la llegada de abundantes energías renovables es un dolor de cabeza. Kaiserwetter opina lo contrario; que es una gran oportunidad. Mientras que otras compañías persisten en los métodos tradicionales de ‘asset management’, lo cual hacen aún más difícil determinar lo que está sucediendo y lo que significa para los inversores de infraestructura de energía (tanto las LP como las empresas LG), los líderes en Smart Data Analytics, que cruzan información entre proyectos localizados en todo el planeta, hacen de la revolución digital en ENERTECH un instrumento de planificación y disminución del riesgo.

 

Tribuna publicada en EFE