Cinco claves para elegir la mejor financiación para nuestra empresa

La financiación es un pilar clave para la puesta en marcha, expansión o supervivencia de cualquier negocio. Pero no todas las formas de financiación son iguales. Es importante que empresarios y directivos conozcan las diversas vías de financiación y que valoren cuál se adapta mejor a las necesidades de su negocio.

Diego Pitarch,  profesor del Master in International Finance, expone en esta breve entrevista algunas cuestiones clave que se deben tener en cuenta a la hora de buscar financiación en el entorno actual.

La elección de la financiación es un punto clave a la hora de arrancar cualquier proyecto empresarial o cualquier proyecto de expansión. ¿Cuáles son los indicadores que tiene que cuidar una empresa que busca financiación?

Lo primero que hay que tener en cuenta es de dónde se va a obtener esa financiación, si es a través de inversores que quieran participar de la empresa o a través de una financiación ajena, como una entidad financiera.

Para el primer caso, la empresa deberá saber que los inversores, socios o accionistas quieren una rentabilidad y dependiendo de la naturaleza de la empresa, van a buscar unos ratios de rentabilidad (normalmente EBITDA) muy altos donde realmente vean el negocio.

Si hablamos del segundo caso, lo primero es saber si va a poder devolver la financiación ajena, a qué tipo de interés, plazos, si va a tener que afrontarlo con patrimonio particular, los costes que suponen en la empresa una devolución de un préstamo, cuánto cuesta un retraso en devolución de la financiación, que costes “ocultos” puede tener esa financiación refiriéndonos a que otros productos financieros nos van a hacer contratar, y por supuesto… el importe de la financiación.

¿Cuáles considerarías que son las principales formas de financiación (pública y privada) que tiene a disposición una empresa en España?

Hay muchísimas formas para financiarse en España. Desde un préstamo clásico bancario, hasta el crowdfunding, pasando por la búsqueda de financiación a través Business Angels, Venture Capital, el mismo factoring, el leasing, el bartering que se puso muy de moda a raíz de la crisis del 2008, etc, hay muchas formas, pero desde luego, el clásico préstamo bancario es el que más y mejor entienden las empresas en términos generales.

Si hablamos de financiación pública, hay muchos organismos que ofrecen ayudas para el crecimiento o el emprendimiento, desde fondos de la UE, pasando por ayudas autonómicas e incluso de ayuntamientos. En muchos casos se trata de ayuda para la formación o la internacionalización, un ejemplo claro de estos tres niveles son las ayudas y financiación a la exportación que ofrece el ICEX (estatal) la Ventanilla Única de internacionalización (VUI) de la comunidad de Madrid o el propio ayuntamiento de la capital.

¿Crees que según el tamaño de la empresa puede optar por una financiación u otra? 

La verdad es que si, pero si hablamos de fondos públicos con más razón, ya que para acceder a determinadas fuentes de financiación hay que cumplir con determinados requisitos que muchas PYMES o empresas de nueva creación no conseguirán en el corto plazo. Vivimos en un país que hay formas de financiarse muy adecuadas para cada tamaño de empresa, de manera que las pequeñas que normalmente siempre tienen más problemas de caja o que su flujo de caja es mas ajustado tienen modelos de financiación muy ágiles en e ámbito privado que las instituciones públicas no facilitan siempre.

Dentro de la gama de productos, ¿Consideras que el renting y el leasing son las mejores formas de financiarse a medio y largo plazo?

No necesariamente el renting o el leasing son las mejores formas. Son formas MUY interesantes de cara a afrontar determinadas inversiones y transformando un coste fijo en uno variable y además eliminado las amortizaciones y convirtiéndolo en un gasto ordinarily. Para la financiación de activos de amortización rápida y obsolescencia más o menos rápida, a mí, particularmente, me parecen unos productos muy interesantes.

Dado el contexto macroeconómico, ¿es un buen momento para hacerse con una financiación?

Que magnífica pregunta… siempre es un buen momento para la financiación, pero para lo que se nos viene encima, que nos va a obligar a ser más competitivos en muchos sentidos, la financiación va a ser muy bienvenida para la tecnología, la internacionalización y para adecuar a las empresas a un nuevo ciclo y modelo económico. Sin duda las empresas necesitan crecer y para ello, van a necesitar financiarse.